Hace unas semanas posteamos un artículo en el que hablábamos sobre las cosas más cagantes de ir a un Festival Musical, ahora toca el turno a lo contrario: las cosas positivas que nos deja el vivir esta tipo de eventos musicales.
1.- Conocer bandas y propuestas.
Uno de los aspectos más positivos de los festivales musicales es la diversidad de sub géneros y propuestas que se incluyen en estos eventos. Desde hip – hop, metal, ska, rock pop, música electrónica, alternativo, incluso hasta música grupera.
En estos conciertos puedes toparte con propuestas que no habías escuchado o a las cuales no les habías puesto atención suficiente, y ahí podrás apreciar de mejor manera su plataforma musical y descubrir verdaderas joyitas musicales. Y no sólo nos referimos a bandas emergentes, sino a bandas ya consolidadas a las cuales tal vez no habías escuchado.
2.- Conocer gente.
Estos festivales acarrean gran cantidad y diversidad de personas, por ello ahí podrás conocer gente con la cual puedas desarrollar amistad y, por qué no, hasta una relación amorosa. Es común que este tipo de relaciones se den por compartir ese gusto por los conciertos y grupos en particular, siendo estas relaciones por lo general bastante duraderas.
3.- Ver muchos grupos por un precio más económico.
Mucha gente se queja por el precio de los boletos para los festivales, lo que no analizan es la cantidad y calidad de bandas que verán por ese mismo boleto. He aquí una de las grandísimas ventajas de los festivales, el ahorro económico que implican.
4.- Ver grupos que difícilmente vendrían en solitario
Si bien Monterrey es una de las “plazas más importantes” del país en cuestión musical, es innegable que muchos conciertos no llegan acá, y se quedan en el D.F o Guadalajara, lo que implica perderse la oportunidad de ver a determinada banda o hacer una fuerte inversión para viajar a dicho concierto.
Así, a través de los festivales musicales pudimos apreciar en el pasado Machaca a Wolfmother, y en los siguientes festivales podremos ver a grupos como MGMT, Foster the people, Travis, entre otros; bandas que tal vez no pudiesen venir en solitario a nuestra ciudad.
5.-Vivir esa experiencia musical
Si un concierto es una gran experiencia musical, un festival musical es, sin exagerar, una experiencia de vida. Ser parte de un evento de este tipo es maravilloso, es algo que difícilmente se olvida.
Las experiencias que ahí se viven se transforman en anécdotas que recuerdas por siempre y que inevitablemente terminan siendo tema de conversación, incluso años después de este festival.
Además, esas emociones que se crean gracias a la música que te gusta y al ambiente que arma el público origina una especie de catarsis, que te ayuda a olvidarte, aunque sea por un momento, de los problemas o situaciones dolorosas, ayudándote a desahogarte.
Esperemos que los empresarios sigan realizando estos festivales, a pesar del gran esfuerzo y riesgo económico que esto implica, por lo cual no está demás hacer público nuestro reconocimiento a ellos por apostar por el rock and roll (parafraseando a Héroes del Silencio).