Con casi 30 canciones y por más de 2 horas, el emblemático grupo de rock en español Café Tacvba festejó sus 25 años como banda y los 20 años de su segundo álbum de estudio “Re”.
Hace 25 años, en 1989, un cuarteto de rock alternativo originado en Ciudad Satélite comenzaba a sobresalir entre los grupos mexicanos de ese entonces: Café Tacvba, que con su manera de vestir y de actuar en el escenario cautivó por completo al público.
Cinco años después, en 1994, su segundo álbum de estudio “Re”, considerado por los fanáticos “el mejor de la historia de los tacvbos”, terminó por encantar a cada uno de los rockeros mexicanos con la cuantiosa experimentación musical que hay en él, pues diversos géneros como el ska, punk, funk, metal, banda, grunge, boleros y hasta música norteña, se ven plasmados dentro de los 20 temas que guarda.
GALERÍA FOTOGRÁFICA (CLICK AQUÍ)
Es por esto, que un gran homenaje ha sido presenciado por sus miles de fans, y ayer fue el turno de Monterrey en el abarrotado Auditorio Banamex con el sonar de cada una de las 20 canciones que conforman “Re”, además de disfrutar de las complacencias que la banda regaló al final del homenaje.
Chicos y grandes; una multitud de variadas generaciones fueron llenando poco a poco de arriba a abajo el auditorio, y fue alrededor de las 9:15 horas que al encender del enorme y simbólico caracol que lleva de portada el álbum festejado, y con la canción “Veracruz” del ícono Agustín Lara de fondo, arribaron al escenario Rubén, Meme, Quique y Joselo para iniciar la explosiva noche.
Sin palabra alguna, y ataviado de un saco con luces anaranjadas, Rubén interpretó “El aparato”, exaltando el corazón de cada uno de los presentes, quienes al término del tema ovacionaron con gritos y aplausos el inicio del espectáculo.
Después de una breve apagada de luces, Rubén apareció de nuevo sobre el escenario, esta vez portando un delantal rojo que anunciaba la llegada del siguiente éxito: “Ingrata”, con la cual, la intensidad de la voz de los emocionados asistentes opacaron la voz del interprete expresando sus sentimientos hacia aquel ingrato o ingrata al que cantaban, dejando apenas espacio para tomar aire; y fue con un enorme salto que la banda remató el tema para saludar a los presentes:
“Muchachos, muchachas, un saludo a todos. Estamos cumpliendo 25 años de carrera artística, si quieren nos pueden cantar las mañanitas”, dijo Albarrán dándole paso a un mar de voces que, sin pensarlo, comenzaron a entonar “Las mañanitas” a todo pulmón.
Después, el antes conocido como “Cosme”, explicó que debido al festejo de los 20 años del “Re”, tocarían de principio a fin todos los temas del álbum: “Para que no estén diciendo que toquemos “Chilanga banda” o “Eres” porque no las vamos a tocar hasta que toquemos todo el disco”, expresó bromeando.
Seguido del funk que ofreció “El ciclón”, los metaleros guitarrazos se hicieron presentes con la interpretación de “El borrego”, para después cambiar drásticamente a las dulces notas del bolero “Esa noche”, mostrando el lado serio de Café Tacvba acompañada del feliz público que le cantaba a “La soledad”.
Los temas “24 horas” e “Ixtepec” fueron gozados por los asistentes; y cuando el caracol de luces comenzó a latir al compás del bombo, el cuarteto apareció portando cascos mineros para interpretar “Trópico de cáncer”, mientras Rubén con una grande linterna iluminaba al emocionado público.
El famoso taconazo llegó con “El fin de la infancia”, donde el grupo lució fosforescentes trajes norteños para llenar de color el escenario y prender todo el ambiente con el norteño tema. Después, el requinteo de “Madrugal” comenzó a sonar para convertir a la agrupación de rock, en un impecable trío musical.
“Pez” y “Verde” su fusionaron con la voz de Meme en el micrófono para alegrar aún más la velada con sus tenues notas; en seguida, “La negrita” y “El Tlatoani del Barrio” pusieron a mover las caderas a todos los presentes.
“Las flores” hizo estallar la voz del público, mientras Meme era la locura total con sus pasos de baile frente a sus teclados: “Déjenos ver sus florecitas, hagamos un racimo gigante dedicado a los que más lo necesitan en este momento”, gritó Rubén e hizo referencia a los 43 desaparecidos, lo que ocasionó que todo el lugar, a una sola voz, contara fuertemente del 1 al 43 en honor a aquellos. Después del emotivo momento, cayó una lluvia de aplausos.
Posteriormente, llegó el momento de mover las cabezas y rockear al ritmo de “La pinta”; para que después el intenso “Papara papa eueo” de los fans marcara el inicio de la emblemática canción “El baile y el salón”, que con su metafórica leyenda “La vida es un baile”, convirtió el auditorio en una colorida pista de baile a la que los plateados y vistosos trajes del cuarteto se le unieron. Luego la fiesta siguió con “El puñal y el corazón” y fue culminada con “El balcón”, tema que finaliza el álbum.
Una breve pausa fue suficiente para que Café Tacvba volviera al escenario a interpretar todos aquellos temas que el público deseaba escuchar. “Eres”, interpretada por Meme, “Cómo te extraño mi amor”, y “Las persianas” siguieron con la noche. Pronto, Rubén ya con el pelo alocado y suelto, hizo bailar a todos el “tibiri tabara” con “Chilanga banda”.
“Olita del altamar”, “María” y “Chica banda”, que logró un total éxtasis ante los saltos de Albarrán, también complacieron a los fanáticos; y fue con “Déjate caer” que Meme, Joselo y Quique dejaron sus instrumentos a un lado para acompañar a Rubén y darle paso a una loca y peculiar coreografía que todo el mundo aplaudió, y posteriormente se despidieron de todos aquellos que hicieron del festejo una total fiesta musical.
Después de recorrer de lado a lado el escenario y firmar algunos objetos, Café Tacvba se despidió de los regios, quienes en toda la noche no se sentaron y disfrutaron de todas y cada una de las interpretaciones que brindó la chilanga banda en el Auditorio Banamex.