DLD ofreció enérgico show en el Café Iguana este 9 de mayo.
Una de las mejores bandas de rock mexicano en la actualidad, DLD, llegó a Monterrey para presentar, por primera vez, un concierto exclusivo en el que dieron todo un recorrido por sus éxitos más viejos, hasta los más actuales de su recién estrenado álbum “Futura”.
Ya había caído la noche cuando en las afueras del Café Iguana podía visualizarse a aquellos fanáticos de la banda, y las ansias comenzaban a invadir el lugar. Fue justo a las 23:30 horas cuando la espera había terminado.
Luces moradas bañaban de lado a lado el escenario mientras uno a uno se iban acomodando los instrumentos de la banda; al fondo, podía verse a ‘Buba’, el robot y fiel acompañante de la banda, plasmado en el bombo de la batería.
Unas potentes luces blancas comenzaron a parpadear fuertemente mientras, en medio de gritos y piropos, subían al escenario Francisco, Erik y Edgar. En medio de la euforia que hizo olvidar la espera, se dio paso al primer tema de la noche: “1 de octubre”.
Con un “¡Arriba, Monterrey!” de Francisco Familiar, se pintaron cientos de manos rockeras del publico que, a su vez, gritaba con esmero: “¡DLD, DLD!”.
El primer tema de su álbum “Futura” llegó con “Soy”; después, el furor de “Arsénico” puso a brincar a todos los presentes, quienes con euforia preguntaban ‘¿En dónde está el arsénico amor?’.
“Esta canción no es nuestra, es de ustedes”, gritó Familiar a sus fans, y “Dixie” comenzó a sonar; con el tema se vivió todo un éxtasis, y en el puente musical, Francisco alzó sus brazos para acompañar la melodía con las palmas, y sus seguidores, hipnotizados por la canción, imitaron aquel movimiento, haciendo de la noche una sublime velada.
“Némesis” y “Sea”, siguieron llenando el ambiente de energía. Y después, el público tomó el control de la noche al llegar la canción con dicho nombre, “Control”, puesto que se dejaron ir y sus voces terminaron por predominar en todo el lugar.
En medio del baile y la comicidad que irradiaba Francisco, los fans disfrutaban de cada canción sonada, que iban desde sus álbumes más viejos hasta lo más reciente de la agrupación.
“El mapa de tus ojos” y “Las cruzadas” fueron algunos otros temas parte del setlist.
Un momento inolvidable con una dedicatoria muy especial fue vivido esa noche, pues fue tocada una canción dedicada “a todas esas personas que están en otro plano”, decía Familiar, se trataba de “Reencuentro”, tema incluido en el álbum Futura que es un tributo a Arturo Rojas “Doppler”, fallecido tecladista de la banda.
La conexión banda-público se vivía sensacional. Fue sin duda el instante más emotivo de la velada.
“Viernes”, una de las más esperadas de la noche levantó enormemente el ánimo. Seguido a ésta, llegó su sencillo “Estaré”, que por cierto, estrenó video este viernes.
Ante la sorpresa de los seguidores, los músicos bajaron del escenario, y éstos, sediento de más, comenzaron a gritar a una sola voz “¡Oé, oé, oé! ¡Dildo, Dildo!”, pues recordemos, este fue el nombre con el que inició la banda y aquel que sus fieles fans no están dispuestos a olvidar.
DLD volvió una vez más para cerrar el show con todo un clímax. “Mi Vida”, canción tributo a José Jos,é fue interpretada.
Seguido a ella llegó “Todo cuenta”, que desgarró las gargantas de los presentes y, a su término, los músicos comenzaron a brindar con la gente regia. De uno a uno y con la misma copa, agradecieron por aquella noche.
El cierre del viaje musical fue “Por siempre”; sin embargo, aún después de escuchar las gracias y ver bajar a sus ídolos de la tarima, los seguidores reclamaban con ansias que regresaran a tocar un tema que desde el comienzo era pedido a gritos, “Un vicio caro es el amor”; al ver la nula respuesta, se retiraron, pero el hecho de no haberla escuchado no les impidió salir del lugar satisfechos y con una enorme sonrisa de poder haber sido parte del primer show exclusivo de la banda en la ciudad.
Fue así que culminó una noche llena de energía y de la buena dosis de rock que ofrece DLD.
