El virtuoso Yngwie Malmsteen se presentó ante 1000 personas en el Escena Monterrey, la noche de este viernes.
Este viernes 20 de mayo se vivió una noche de gala para la escena rockera de la ciudad, ya que el virtuoso guitarrista Yngwie Malmsteen se presentó en el Escena Monterrey, brindando una noche memorable en la que dio un derroche brutal de sentimiento y virtuosismo.
La jornada inició desde temprana hora, ya que cerca de las 10 de la noche quedó todo dispuesto para que el guitarrista sueco se apoderara del stage del Escena. “Rising force” y “Spellbound” fueron las elegidas por Yngwie Malmsteen para iniciar el concierto, con las cuales causó de inmediato el furor de las 1000 almas presentes.
Fiel a su estilo, Yngwie Malmsteen estuvo yendo de un lado a otro, aventando púas a diestra y siniestra y tirando patadas al aire, mientras daba rienda suelta su virtuosismo. El show continuó con canciones como “Razor eater”, “Damnation game” y “Repent”, las cuales llevaron al público a diversos estados, de la contemplación y perplejidad silenciosa a la explosión emocional. Y es que no es para menos, Malmsteen es todo un show-man, su técnica y destreza con las 6 cuerdas es impactante y si a eso se le agrega las acrobacias que hace con su guitarra y su estilo estrafalario, da por resultado que el público se enganche irremediablemente con Yngwie.
“Arpeggios from hell”, “Badinerie” (de J. S. Bach), “Masquerade” y “Heaven tonight” fueron otras de las canciones que se dejaron escuchar durante este excelsa presentación. La parte final del concierto se acercaba y se daría de forma intensa, con 2 poderosas canciones, primeramente, “Black Star”, con la cual Yngwie Malmsteen llenó de misticismo el ambiente que se sentía en el Escena, y finalmente “I’ll see the light tonight”, con la cual el sueco cerró con broche de oro un concierto que resultó una verdadera fiesta para los amantes del rock en Monterrey.
