Llamas, magia y color: la psicoledia al cien se vivió con la presentación de The Flaming Lips en el Hellow Festival 2016.
Monterrey.- Para espectáculos, el de The Flaming Lips. Para ellos no basta con llenar de energía a su público a la par de sus canciones, sino que buscan la manera de adentrarlos por completo al mágico mundo que ofrecen en cada show; esta vez lo hicieron en el Hellow Festival 2016.
La noche ya había caído, la oscuridad arropaba ya al Parque Fundidora; pasaban de las 21:30 horas y las llamas comenzaron a sentirse. Sobre el escenario Rock Stage del Hellow caían cascadas de luces que sirvieron como telón para los anfitriones de ese momento, quienes uno a uno fueron subiendo al escenario para adentrarse a un mundo totalmente diferente.
Al frente llegó Wayne Coyne ataviado de una especie de smoking galático, adornado con pequeños círculos de colores y abanicos “a juego” que no hacían más que acaparar las miradas del público.
Cuando las primeras notas comenzaron a sonar, una decena de enormes y coloridos globos corrieron hacia el público para comenzar una lucha entre quien se divertía aventándolos y quien se quejaba de su nula visibilidad. Ta,bién salió a escena un enorme globo con la frase ‘Fuck Yeah Hellow Festival’, del cual inmediatamente se adueñaron los asistentes.
Para el segundo tema de la velada subieron a la tarima tres botargas inflables que rodearon a Wayne mientras interpretaba ‘Yoshimi Battles the Pink Robots, Pt. 1’.
Los actos no paraban de emerger en el mágico show: un enorme arcoris inflable nació sobre el escenario para dar un toque aún más épico. Seguido de ello, la tranquilidad reinó con ‘Waitin’ for a Superman’, acompañada de brazos que se meneaban lentamente de izquierda a derecha
Como un homenaje al fallecido ícono David Bowie, la banda intepretó el cover ‘Space Oddity’; aunque no hubo globos blancos adornando el lugar, los sentimientos a flote sí lo hicieron. Dentro de una bola transparente e inflable, Wayne pasó sobre el mar de manos que tenían como público, haciendo desatar la euforia entre quienes no querían perder la oportunidad de tocarlo. El momento también cimbró la nostalgia haciendo recordar al camaleón del rock que hace algunos meses partió a su nueva odisea.
Los originarios de Oklahoma tuvieron una interacción inigualable con los regios, y fue así como por más de una hora The Flaming Lips logró colorear cada rincón del festival con la psicoledia que invade a sus hits, haciendo de esa noche, ‘la noche’.
Actualmente se dice que The Flaming Lips está ajustando los últimos detalles de su nuevo disco que tentativamente llevaría por nombre ‘Oczy Mlody’.