La banda española se presentó anoche en la Arena Monterrey ante miles de fans.
Por Elizabeth Ramos
No importó que fuese mitad de semana, ni el tráfico ni las ocupaciones diarias para miles de metaleros vestidos con sus camisetas negras y demás parafernalia que abarrotaron anoche la Arena Monterrey para disfrutar del concierto de Mago de Oz.
Y es que la conexión de tiene la banda con el público mexicano es única y en Monterrey no es la excepción.
Fue en punto de las 22:12 horas cuando se abrió el telón y después de un intro saltaron al escenario interpretando el clásico “Satania”. El publico inmediatamente cantó enérgicamente la letra, saltando y aplaudiendo.
Para la ocasión se contó con una escenario en forma de barco pirata, adornado con cañones, cuerdas y demás elementos que crearon la ilusión de estar ahí.
Además estuvo presente una orquesta sinfónica, pantalla auxiliar y algunos fuegos artificiales que iban acorde en momentos de algunas canciones.
Mago de Oz viene presentando a su nuevo vocalista Rafa Blas el cual fue anunciado el pasado mes de abril; él es un cantante español conocido por ser ganador de la Voz España del 2012, comenzando a destacar como cantante de heavy metal y por tener un rango vocal excepcional digno del género.
El set list fue muy variado incluyendo canciones de la vieja escuela como “Jesús de Chamberi”, “El que Quiera Entender que Entienda” y “Finisterra”.
Como cantantes invitados estuvieron Tete Novoa y Charly López quienes estuvieron alternando a lo largo de la noche.
Uno de los momentos cumbre fue durante la canción “Ranxeira”, canción dedicada en homenaje al público mexicano interpretada por Xana Lavey; inmediatamente la gente enloqueció algo que la banda agradeció y recalcó el cariño y lo significativo que es México en la consolidación de su carrera.
Para finalizar, después de más de 2 horas de concierto llegaron las más esperadas de la noche: “Molinos de Viento” y “Fiesta Pagana”, las cuales hicieron que el cansancio se olvidara y que hasta la última persona sentada se pusiera de pie, para brincar, saltar e incluso abrazarse con extraños alzando un vaso de cerveza tal como si se tratase de una taberna medieval.
En resumen, Mago de Oz se ha convertido en quizá la banda más importante del Heavy Metal en español de todos los tiempos y cómo no serlo si cuentan con una producción de primera, músicos comprometidos por dar el máximo, sonido impecable, escenografía que nos hace meternos en su mundo, pero sobre todo una gran pasión y esfuerzo por crear emociones y experiencias en más de 35 años de historia, lo que les ha traído fechas agotadas y millones de discos vendidos.
Sin duda ya estamos contando los días para su próxima visita.