Y finalmente se dio el reencuentro de Interpol con su público mexicano en el Zócalo capitalino.
Las expectativas eran altas y estas fueron cumplidas por la banda neoyorkina, confirmando que México les ama.
Desde ayer se fueron armando las filas alrededor del corazón de México.
Con las ansias a tope y un ambiente de algarabía, se fue acercando la hora hasta que dieron las 8 de la noche para el arranque del concierto “interpolero”.
El vibrante intro de “C’mere” marcó el inicio del apasionado concierto de Interpol. Los guitarrazos y la frase “It’s way too late…” bastaron para desatar la locura.
Si algo caracteriza a Interpol es la sobriedad con la que se comportan en el escenario: no hacen aspavientos, no recurren a trucos “tribuneros” e incluso interactúan poco con el público (la verdad, no lo necesitan), pero esta ocasión fue especial y Paul Banks lo demostró sonriendo y manteniendo mayor contacto con los fans.
De la estridencia de “Say hello to The angels” y la oscuridad de “Narc” se brincó a la melancolía con “My desire”.
El imponente marco del centro de la CDMX fue ideal para este momento de comunión entre el grupo y más de 160 mil almas (cifra oficial), las cuales vibraron con canciones como “Lights”, Obstacle 1″, “Pioneer To The falls” y “The Rover”, haciendo así un recorrido a través de varios de los momentos que han marcado su carrera.
Aunque como ya era sabido, Sam Fogarino no estuvo presente y claro que se resintió su ausencia, pero a pesar de eso su sustituto Chris Broome logró cumplir en los tambores y platillos acoplándose de gran manera al bajista Brad Truax para mantener la característica base rítmica de la banda.
De “Rest My chemistry, “PDA” hasta lo.mas nuevo como “Toni”, así de variado estuvo el setlist el cual dejó fuera a joyitas como “The Heinrich Maneuver” o “Pace is The trick”, pero que incluyó perlitas como “Public Pervert” y clásicos de la talla de “Not Even jail.
Y sí, todos cantaron el ya clásico “Roooooousmeri” del intro de “Evil”, la cual junto con “Slow hands” marcó la retirada de la banda.
Sin embargo regresaron para tocar tres temas más. Primero sonó “Untitled”, el primer tema de su primer disco, el oscuro “Turn on The bright Lights”.
El ambiente melancólico continuó con “No I in Threesome” para ponerle punto final a este histórico concierto con “Stella Was a Diver And She Was Always Down”.
Sí: Interpol ama a México y México ama a Interpol.