“Abbey Road” es el álbum número 11 en la discografía de The Beatles y fue publicado el 26 de septiembre de 1969.
Hoy 26 de septiembre se cumplen 55 años de la salida al mercado del legendario álbum “Abbey Road” de The Beatles; sí, se trata de aquel en cuya portada aparece el “Cuarteto de Liverpool” cruzando la calle.
“Abbey Road” de The Beatles es considerado una obra de arte
Este disco posee varios aspectos importantes y muy interesantes; primeramente, se trata del último trabajo de estudio de Beatles, ya que si bien “Let it be” fue publicado en 1970, éste fue realizado antes de trabajar el material de “Abbey Road”.
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Otro aspecto a resaltar de “Abbey Road” es su portada: es la clásica portada con John, George, Ringo y Paul caminando sobre el paso de “cebra” par cruzar la calle Abbey Road; es una de las imágenes más imitadas y parodiadas de todos los tiempos y ese lugar es uno de los más visitados por los turistas, alcanzando en 2010 el grado de “Monumento Clasificado” por su trascendencia histórica y cultural.
Y el aspecto más sobresaliente es, sin duda alguna, su calidad musical.
“Abbey Road” fue opacado (como los demás álbumes de los Beatles) por el psicodélico y atrevido “Sgt. Peper’s Lonely hearts club band” y por el majestuoso “The Beatles”, mejor conocido como el “Álbum Blanco”, pero “Abbey Road” es un maravilloso disco, poseedor de un sonido compacto e intenso.
En él se incluyen canciones que han pasado a la categoría de clásicos como “Come Together”, “Something”, “Here comes the sun” y “I want you”, además de otras joyitas como “Oh! Darling”, “You never give me your money”, “She Came In Through The Bathroom Window”.
Es un verdadero agasajo escuchar el excelso trabajo en las armonías vocales de Paul, John, George y Ringo, además de los clásicos arreglos orquestales de George Martin.
El periodo de grabación inició el 22 de enero y terminó el 19 de agosto de 1969; como productor participó el genio George Martin y como Ingenieros de grabación Geoff Emerick y Alan Parsons; teniendo como músico invitado al virtuoso Billy Preston tocando el órgano en “I want you”, y un sinfín de músicos de orquesta.
El trabajo de grabación no fue fácil, ya que las tensiones internas eran casi insoportables; prácticamente el sistema consistió en que cada integrante llevara al estudio algunas canciones y usará a los demás integrantes como comparsas, a pesar de esto la fórmula funcionó.
La trascendencia de este disco de The Beatles se demuestra con el disco de diamante obtenido por las altas ventas y por su inclusión en la lista de los 500 mejores álbumes de todos los tiempos de la revista Rolling Stones, ocupando el lugar número 14. Se trata sin duda alguna de una verdadera joya, la cual es ampliamente recomendada para todo el mundo.