Las Espantosas X presentaron este domingo su DVD, “Espantosamente acústico”.
Por: César Casillas
El domingo 10 de julio se llevó a cabo la presentación oficial del nuevo DVD de las Espantosas X. Este lleva por título “Espantosamente acústico” y fue grabado en el Aula Magna de la UANL. Dicho DVD salió a la venta hace aproximadamente mes y medio, y en la compra del mismo se incluía la entrada para el concierto realizado en el Nandas 78 del Barrio Antiguo este pasado fin de semana.
A través de sus redes sociales, las Espantosas adelantaban un poco de lo que viviríamos el domingo; un concierto poco publicitado y bastante íntimo en el que no hubo necesidad de quitar las sillas y las mesas del bar, en el que estaríamos solo los que debíamos estar… y vaya que así fue. El ambiente que se respiraba en el Nandas esa noche es un ejemplo de lo que las Espantosas X son como agrupación; pura fiesta, pura entrega, una avalancha de ritmos y estilos musicales que se te mete en la piel… y a la vez, también una tocada de barrio, un concierto en el patio de la casa de tus amigos de toda la vida; compartiendo el espacio, los cigarros, la cerveza… siendo parte de la música y la música parte de ti.
Los grupos abridores anunciados para este concierto (Black Bears, The Rumers, Radiofónica y Los Tiburones) tocaron su set list también de forma acústica, en lo personal, destaco la participación de Radiofónica y sus canciones “Mírame” y “Esta fe” y la irreverencia de Los Tiburones, ataviados con clériman sacerdotal y tocando sus canciones con nuevos arreglos acústicos.
Una vez que salió a tocar Espantosas X, con la debida caguama Carta Blanca en mi mano, confirmé mis expectativas… que el poderío escénico de la banda estuvo muy por encima de lo grabado en el DVD del Aula Magna; que fue algo así como si filmaras a un coyote en la sala de espera de un hospital… se ve raro fuera de su hábitat; así pues con las Espantosas, una vez estando en su casa, en su ambiente, la tocada fluyó intensa, emotiva y con momentos que no podrían salir en el DVD, como por ejemplo, cuando cantaron “Presta” de El Tri, o “Te vas a acordar de mi” del recién fallecido Lalito Tex y sus Tex Tex. El concierto se llevó a cabo con pocos errores, sin altercados y con la gente pidiendo más canciones, una tocada que le quitó el tedio al domingo y alimentó el alma; como deberían ser todas las tocadas.
Al terminar la música, mientras veía como bajaban sus instrumentos del escenario y los guardaban, me preguntaba si seguirán tocando como una “cochera band” dentro de, por decir un número, tres años… si en tres años seguirán acarreando ellos mismos sus instrumentos. No lo creo, y no lo creo porque la música de las Espantosas X, independientemente de la calidad de su lírica o su ejecución, genera en su público ese sentimiento que siempre perseguimos los que vamos a una tocada; esa ansia de baile y desmadre, ese desconectarse del entorno por un par de horas para entregarse a la euforia colectiva, sacar a danzar los demonios, salir del concierto vacío, limpio; listo para seguir dándote de chingazos con la realidad el resto de la semana.
Platicando con Raúl Muñoz, guitarrista del grupo, hablamos un poco de esto y de la honestidad con que el grupo compone, ensaya, se sube al escenario y ejecuta su arte sin poses, sin una agenda mediática, esto la gente lo percibe y lo agradece. Yo creo que su honestidad al tocar es su virtud y su maldición; porque, lamentablemente, tal vez se necesite de más performance para impresionar a las grandes disqueras que el que se necesita para que una pareja de jóvenes bailen ska frente a un escenario.
En la reseña del DVD “Espantosamente acústico”, publicada en este medio la semana pasada, mencionaba que el concierto realizado en el Aula Magna Universitaria no era “la mejor carta de presentación” de las Espantosas X, pero que el DVD nos ofrecía la posibilidad, a través del boleto incluido, de verlos y sentirlos y bailarlos y gritarlos en vivo. Así pues, el video grabado quedaría solo como una introducción, como una bienvenida al mundo de las Espantosas X, una banda de cochera que lleva 19 años ensayando con la intención de asaltar la escena musical nacional y conseguir la fama y el dinero que dan los grandes festivales, o tal vez no sea esa la intención, tal vez solo tocan para cambiarles el ánimo a sus escuchas, por ejemplo, a las menos de 150 personas que estuvimos bailando y peleándole el calor a la noche del domingo adentro del Nandas.
No se puede saber lo que el futuro les depare a estos músicos, pero yo, sin afán de pegarle al adivino, pronostico algunas cosas grandes para esta agrupación regiomontana, cuyo poder escénico ha pasado desapercibido hasta el día de hoy por los grandes “dueños de la escena musical mexicana”. No tengo duda de que se abrirá una grieta en el sistema para que ellos irrumpan y arrebaten su oportunidad, después de eso no se sabe, tal vez la aprovechen, tal vez no, pueden pasar mil cosas, pero presiento que, cuando a las Espantosas X se les alineen las estrellas, darán un brinco a los grandes escenarios para escribir su historia, una historia de éxito o de fracaso, tal vez, una historia a fin de cuentas.
Los que estuvieron presentes en el Nandas 78 para la presentación del “Espantosamente acústico” saben de lo que les hablo en esta reseña, y los que no, les recomiendo que busquen la oportunidad de ir a la próxima tocada de las Espantosas X para comprobarlo con sus propios ojos.