Gran vacío dejó la salida del aire del programa Desvelados, de Juan Ramón Palacios, ¡cómo se le extraña!
Hay programas de televisión que no solo se convierten en una forma de entretenimiento de masas, sino que trascienden de manera importante esta esfera, convirtiéndose en elemento catalizador de movimientos y manifestaciones de todo tipo, anclándose en el ideario colectivo de varias generaciones.
Un ejemplo de este tipo de programas de televisión es, sin duda alguna, Desvelados. Fue el 13 de diciembre de 1991 cuando el gran Juan Ramón Palacios encabezó un experimento de televisión de Televisa Monterrey, consistente en la proyección de videos en la noche – madrugada, con la finalidad de probar la modalidad de sonido stereo.
La respuesta fue completamente inesperada: el público se ganchó de inmediato con el formato y forzó a los participantes a efectuar el programa en forma, bautizándolo como Desvelados por obvias razones. Los programas eran los viernes y sábados, el viernes para música en español y el siguiente día en inglés. El rock fue el género predominante, pero también se le dio cabida al pop, el rap y a la música grupera, favoreciendo la diversidad, la tolerancia y el respeto a toda manifestación musical, aspecto que vale la pena resaltar. Además de que eran buenísimos para ganar entrevistas exclusivas, acceso a la grabación de discos o videos y para transmitir desde backstage, cosa imposible para un “medio local”.
Otro aspecto importante de Desvelados es que no copiaron fórmula alguna, ni usaban apuntador, el lenguaje usado era coloquial, muy cercano a “la raza”, democrático completamente en cuanto a los contenidos, y cargado de irreverencia y desfachatez, lo que se traducía en una originalidad y frescura que el público disfrutaba cada fin de semana. Todo esto les trajo gran popularidad no solo en nuestra ciudad, sino en varias zonas del país, gracias a la transmisión del programa a través de sistemas de TV de paga. Pronto llamaron la atención de Televisa México y les llegó la propuesta de realizar el programa desde la Capital para transmitirse a todo el país, con todo el apoyo del emporio, pero las exigencias y limitaciones creativas que esto conllevaba hicieron que la propuesta no fuese aceptada (cosa que todos agradecemos).
Cabe mencionar que Desvelados no se limitó a la transmisión de televisión, sino que emprendieron diversas actividades, igual de trascendentes y exitosas. Por un lado, organizaron y efectuaron mucha obra social (¿se acuerdan de la Navidad en Verano?), hecho que le valió a Juan Ramón y su equipo el reconocimiento de asociaciones, oficinas gubernamentales y del público en general.
Por otro lado, crearon una entrega de premios para lo mejor de la música, la entrañable “Almohada de oro”, en la cual se efectuaban presentaciones de las agrupaciones del momento, realizándose en recintos como el Auditorio Coca Cola, el Vat Kru, el Gimnasio Nuevo León, entre otros.
Desvelados creó todo un concepto original de concursos, en el que el premio consistía en un viaje a algún concierto o evento especial, los maravillosos Desvelados Tour, en los cuales llevaron a ganadores a conciertos de artistas como Michael Jackson, Caifanes, Madonna, Paul McCartney, por citar a algunos, además de festivales musicales y eventos deportivos.
Asimismo, Juan Ramón Palacios incursionó en radio con el programa Radio Desvelados, el cual reforzó el apoyo que Desvelados TV le daba a las bandas locales y bandas emergentes de otras zonas del país. Y es precisamente éste el aspecto más importante del programa de Juan Ramón Palacios y su equipo de trabajo, el que más huella dejó: el vital apoyo que le dieron a las bandas de rock y a algunos grupos de pop.
Agrupaciones como Caifanes, Café Tacvba, Maldita Vecindad, El Tri, Fobia, entre otros, recibieron apoyo de Desvelados, acrecentando de manera notable la cantidad de seguidores que tenían en nuestra ciudad, además de que bandas como Molotov y Estrambóticos, por citar a algunas bandas del país, y toda la escena local, conocida en su momento como la “Avanzada Regia”, recibieron el apoyo necesario para despegar y crecer. Es decir, Desvelados no se fue a lo cómodo, de apoyar a las bandas consagradas, sino que emprendieron una gran labor de servir como plataforma para las bandas nuevas, para que éstas expusieran su propuesta ante el público y disqueras, cosa impensable en esa época. No podríamos entender el éxito del rock regiomontano de los 90’s y principios del presente siglo, sin hacer referencia a Juan Ramón Palacios y Desvelados.
Tantos años han pasado de la salida de Desvelados del aire, y la gente sigue aclamando su regreso. El próximo mes de diciembre el programa cumpliría 24 años de nacimiento, ¿habrá algún festejo especial?, ¿algún día Juan Ramón Palacios accederá a volver con su programa? Sólo el tiempo lo dirá.