Simplemente espectacular! Así fue el concierto que Ara Malikian ofreció esta noche en el Auditorio Pabellón M ante un público de más de 1,000 personas.
Por más de dos horas pudimos escuchar a este prodigioso violinista nacido en Beirut, pero de raíces Armenias. Con su Tour “La Increíble Historia del Violín” Ara nos lleva a través de la música por su vida y la de su violín, el cual perteneció primero a su abuelo, luego a su padre, y ahora le pertenece a él.
El concierto comenzó con una canción de Jimmy Hendrix, Voodoo Child, y Requiem de Mozard, aunado a un tema de su autoría. “Muchas gracias, mis compañeros y yo estamos muy agradecidos de estar en este auditorio, les platico la historia de mi violín, perteneció a mi abuelo que nació en Armenia, él era un hombre muy serio, nosotros en la familia pensábamos que tenía parálisis facial de lo serio que era.” Tocó Kach Nazar a continuación. Después siguió platicando una historia de que cuando vivía en Alemania tuvo que aprender a tocar música judía ya que por no saber hablar alemán, se comprometió a tocar en una boda judía. El siguiente tema lo llamó “Con Mucha Nata”.
Continuó con Broken Eggs, un tema de Chopin, y Campanella. Durante algún tiempo de su vida vivió en Londres, y por un año formó parte de la gira del artista Boy George, y en un festival escuchó a un grupo que empezaba en esos años, Radiohead, e interpretó “Paranoid Android.”
Le siguió “Life on Mars” de David Bowie y un tema que trata sobre el barrio en el que creció, “Bourdj Hammound.”
A su hermana le gustaba el rock, y a su padre la música clásica, es por eso que tiene esas dos influencias, sin embargo él quería ser como John Travolta, era su fan, así que una de sus películas favoritas es Pulp Fiction, y es por eso que el siguiente tema fue “Misirlou,” una canción griega que habla sobre una mujer egipcia.
Cada tema tenía su historia, así que el siguiente tema lo escribió para su hijo, y se llama como él, “Kairo.” Un violinista no es dueño del violín, el violín tiene un violinista, y como parte de la historia del suyo, en este momento pertenece a él, pero cuando muera, su violín le “pondrá el cuerno” con otro violinista. La siguiente canción la escribió a su violín, “Requiem para un Loco.”
Como el violín perteneció a su abuelo, habló de cómo éste pudo escapar al genocidio Armenio gracias a que se hizo pasar como miembro de un grupo, así fue como escapó a Líbano. De ahí su padre aprendió a tocar el violín y pudo establecerse con su familia en este país. Ara aprendió a tocar el violín y en 1982 pudo escapar de la guerra en Líbano para estudiar en Europa.
El violín ha sido su medio de escape de guerras y gracias a él ha podido vivir en otros países, así que dedica la siguiente canción a todos los refugiados que hay en el mundo, y desea que todos tuvieran un violín que los ayude a salvarse de estas guerras que hay en el mundo. Esta canción la llamó “1975” en honor al genocidio de Armenia, y es una canción bellísima que tenía a todo el público en silencio sintiendo cada nota que se escuchaba en el Auditorio. Tuvo una gran ovación del público, todos aplaudieron de pie su interpretación, pero el concierto no terminaba, faltaba un homenaje a nuestro país.
Las notas de “Llorona” se escucharon y todos aplaudieron en agradecimiento por esta bella canción. Por último tocó algo de Vivaldi, para terminar esta magnífica noche con una hermosa canción de Bach. Es indiscutible el talento de este gran violinista virtuoso y carismático y hoy le regaló al público de Monterrey un concierto increíble.