Sting se presentó ante 7 mil personas en el Auditorio CitiBanamex.
Esta noche 7 mil almas pudieron disfrutar de un show lleno de rock, jazz y reggae con la presentación de Sting. El cantante y bajista británico trajo a nuestra ciudad su 57th & 9th Tour, con el cual promociona el disco del mismo nombre.
Sting hizo su aparición cerca de las 21:20 horas, después de las presentaciones de Joe Somner (hijo de Sting) y The Last Bandoleros (hijos de Emilio Navaira). El concierto inició de manera intensa con “Synchronicity II” y “Spirits in the Material World”, hits de The Police con los que el público se entregó por completo al bajista.
A pesar de su apariencia fría, Sting se mostró jovial y sonriente, acercándose al público cada que podía, cosa que sus fans agradecieron a través de gritos y sonrisas.
Un clásico más sonaría desde temprano, “Englishman in New York”, con la cual los asistentes pudieron gozar de la cadencia de ese tema lento.
Si bien predominaron personas de arriba de 30 años dentro del público, también pudo verse a algunos niños y adolescentes, confirmándose la trascendencia de Sting a través del paso del tiempo.
No todo fue música de The Police o de los viejos éxitos de Sting, también sonaron canciones del disco “57th & 9th”, el cual salió al mercado el año pasado, tales como “I Can’t Stop Thinking About You”, “One Fine Day”, “Petrol Head” y “Down, Down, Down”, las cuales en verdad son muy buenos temas, representando, tal vez, la etapa más rockera del músico de 65 años.
El concierto continuó con canciones como “Fields of Gold”, “Shape of My Heart” y “Seven Days”, en las cuales Sting pudo dar muestra de su capacidad interpretativa.
En determinado momento del concierto, durante la interpretación de “Desert Rose”, subió al escenario “Raulito” Navaira, quien estuvo acompañando a The Last Bandoleros, y se puso a bailar al ritmo de Sting, haciendo que el ambiente se volviera festivo.
La parte final del concierto se daría de manera intensa, gracias a canciones clásicas como “Message in a Bottle”, “Walking on the Moon”, “Roxanne”, además de tocar una versión de “Ashes to Ashes” de David Bowie.
El gran cierre fue en verdad emotivo, gracias a “Next to You”, “Every Breath You Take” y “Fragile”, con las que Sting demostró que aunque el tiempo y las tendencias musicales cambien, si hay calidad y sentimiento la gente seguirá a su artista favorito.
