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sonata arctica en monterrey

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Sonata Arctica, 25 años y más de 30°C

Sonata Arctica tuvo un gran reencuentro con su público de Monterrey, concierto que forma parte de la gira conmemorativa por el 25 aniversario de la banda. Treinta y un grados centígrados y un bochorno infernal, así nos cayó la noche del cuatro de abril en el centro de Monterrey. Esa misma noche se presentaban en … Leer más

Sonata Arctica

Sonata Arctica tuvo un gran reencuentro con su público de Monterrey, concierto que forma parte de la gira conmemorativa por el 25 aniversario de la banda.

Treinta y un grados centígrados y un bochorno infernal, así nos cayó la noche del cuatro de abril en el centro de Monterrey. Esa misma noche se presentaban en el Barrio Antiguo de Monterrey dos bandas de metal: una de Suiza, otra de Finlandia. Las playeras sin color se veían por los alrededores. Yo me fui con los finlandeses. Era Sonata Arctica que se presentaban en el Nandas Bar.

Llegué cuando acababa de subir la banda telonera, Ancestry, originaria de Chihuahua. Qué buena banda. Afuera alguien dijo: “está hasta la madre”; tenía razón. Al entrar, apenas di unos cuantos pasos me detuvo el gentío. Tuve que irme de aventón con alguien que, igual que yo, pretendía pasar hasta la parte más cercana al escenario, y lo logré.

Esta era la segunda vez que vería a la banda en vivo; la primera vez que asistí a un show de Sonata (como la conocemos en confianza) llegué tarde, apenas pude escuchar las últimas tres canciones desde la puerta. Aquello no me volvería a pasar. Dudé de mi decisión cuando me encontré hundida con mi metro sesenta de estatura entre un mar de nucas, un bochorno infernal, olor a cañería y sudores; súmale a tal desgracia que no había una barra cerca ni mesero que se abriera paso. En el escenario, el staff revisaba los últimos detalles.

De poco en poco el espacio se fue reduciendo, y compartimos sudores. Entre tanto, cada uno fue tomando su lugar en el escenario y recibiendo su respectiva ovación. Como siempre, el público regio los recibió con calidez.

La banda lleva veinticinco años sacando el corazón en cada show, mismos que ahora festejan con este tour 2023 por Latinoamérica, por lo que el setlist abarcó un recorrido por su historia: éxitos de sus primeros discos como “Kingdom for a heart”, “Talulah” y “Fullmoon”. Y también estuvieron “The wolves die young”, “Paid in full”, “Closer to an animal”, “Broken”, “The Cage”, entre otros.

La selección de temas fue justa, los fans no insistieron con otras. Misión cumplida. Breve y contundente, como siempre suelen ser los shows de la banda, pero eso yo no lo sabía la primera vez que compré un boleto para verlos, por eso llegué tarde creyendo que no serían puntuales y que el show se alargaría. La magnífica voz de Tony Kakko sigue intacta, su potencia sigue resaltando, lo mismo que su disponibilidad y calidez con el público.

El concierto en Monterrey fue la primera fecha de cinco más que tendrán en México. Los regios fueron los encargados de darle tan calurosa bienvenida. Seguro no pasará mucho tiempo para tenerlos de regreso en la ciudad, yo espero que para entonces tenga al menos un mesero cerca.