El Parque Fundidora se disfrazó de baile y fiesta con Los Caligaris.
Y una vez más, como cada vez que estos argentinos llegan a cualquier escenario de México, ¡se armó la fiesta!
Ya casi estaba por atardecer y el intenso sol no dejaba de calarnos en la piel. En la pantalla del escenario apareció el conteo que anunciaba el show, y la raza pronto comenzó a aglomerarse.
“Todos locos”, fue la canción con la que Los Caligaris apretaron el botón de encendidos, e inmediatamente, como era de esperarse, el público se transformó: el slam, los gritos, el bullicio, las camisas al aire, las chicas a los hombros, los celulares intentando la mejor toma, el baile, el slam y la algarabía fueron la ambientación que acompaño a Los Caligaris durante su presentación. La adrenalina fluyó por el lugar.
La banda llegó esta vez para presentarnos su tour “Circología”, en el que intercalaron canciones nuevas y clásicas. “Mi estanciera y yo”, “Nadie es perfecto”, “Tyson”, “Entre vos y yo”, “Razón” y “Kilómetros” no pudieron faltar. De las nuevas, complacieron con las esperadas: “Que corran”, “Luchamos por la causa” y “El amor nunca pasa de moda”. Y aunque muchos en esta última esperábamos el dueto con Lupe Esparza de El Gigante de América -con quien hace dueto- éste no se dio. Ni modo, nos quedamos con las ganas.
Lo que sí es que de nuevo, vivimos lo que sólo con Caligaris se vive. Un show más, que aunque corto –pues siempre nos quedamos con ganas de más de las bandas en los fest- no nos decepcionaron.
