SkaWars, uno de los festivales más representativos de Ska en México, conquistó la explanada del Museo de Historia Mexicana.
Con un cartel conformado por ocho bandas y un DJ, y con un programa muy puntual, así vivimos el segundo día de SkaWars (incluido en el cartel del Festival de Expresiones Urbanas: Callegenera) en la explanada del Museo de Historia Mexicana (MHM).
No cabe duda que para armar un buen ambiente no se necesita ni pisto ni porro, sólo hace falta una multitud enardecida, y si a esto se le suma la virtud de ser regio, lo que resulta es mucho mejor. Y es que la banda rockera de Regioland sabe hacer de un día común, algo memorable. Y este día fue la afirmación a mi discernimiento.
Eran las cuatro de la tarde y acá en Monterrey ya andábamos soportando un calorcito por encima de los treinta y un grados; en los noticieros ya se hablaba de riñas y choques derivados del mal humor por el bochorno; pero a la raza ferviente del ska eso no parecía hacerle decaer el ánimo. Y, en medio de todo esto, comenzó a darse cita en la explanada del Museo de Historia Mexicana, en pareja y en grupos, y otros tantos en familia (con carriolas y niños sobre los hombros). Ya se veía venir que el calorcito nomás no lograría hacer decaer la disposición de <
A Jamaica Connection le tocó comenzar a calentar al público con sus mezclas de reggae, que inyectaron al ambiente una atmósfera de oasis.
Los primeros en pisar escenario fueron los tapatíos de Sensemayá; a éstos le secundaron Distorsión Moska (Tamaulipas) y fue entonces que se armó el slam.
De pronto, la explanada se percibió más concurrida, y es que los que habían estado resguardándose del sol, al ver el ambiente que se traían los del frente, optaron por unirse y amontonarse frente al escenario. Luego subieron los New Lios Ska, quienes eran, a juzgar por la audiencia, una de las bandas más esperadas del día.
Después de que éstos bajaron del escenario; ya con los cuerpos más que dispuestos, la raza recibió a los costarricenses de Percance quienes terminaron de inyectar adrenalina al público. Y la neta es que armaron un festín. Las playeras se ondearon en el aire y el hedor de los torsos desnudos comenzó a manifestarse. Las chicas empezaron volar por el aire, y es que, a alguien, ingeniosamente se le ocurrió llevar una manta para catapultarlas. La cosa fue espectacular, las chavas se veían elevarse a varios metros por encima de la multitud. Y así, entre este suceso y la ovación, y el unísono de quienes coreaba las canciones de la banda, se despidieron entonando Mexico lindo y querido a ritmo de ska; para dar paso a los Melodycans, quienes siguieron musicalizando aquel paisaje.
Luego de que éstos terminaron su set, a la raza se le ocurrió seguir amenizando la tarde con algo más, y a la par de Jamaican Connection, en la espera por la siguiente banda, comenzaron una serie de retas (no acordadas e improvisadas) de chicas al aire, acompañadas, cada una, de la ovación del público.
Minutos antes de las ocho de la noche, cuando comenzaba a oscurecer, subió Cabrito Vudu al escenario, y con ellos comenzó la remembranza de aquellos años en donde toda la escena del rock se consolidó, allá donde todo inició. La raza no dejó de corear y sentir cada canción, las emociones se dejaron notar sin inhibición. Luego vino el turno de los californianos de Left Alone, quienes le pusieron un toque más pesado a la noche con su ska punk, y animaron a un slam masivo.
Así, en el clímax del SkaWars, se llegaba la hora del nunca bienvenido final. Y entre gritos, aplausos y frases como: ¡Inspector, inspector, inspector!, ¡Big Javi, eres el único que me hace llorar!, los chavos de Inspector se hicieron presentes; sonando como siempre y como nunca, con dinamismo, con la misma calidad musical y el mismo cariño hacia el público, que los ha caracterizado desde su inicio. Y, entre éxitos, emociones y parejas besándose, cerraron el Ska Wars 2014 y dieron inicio con este evento, al Festival de Expresiones Urbanas: Callegenera 2014.
