Su Majestad imperial, Silverio, se presentó en el Café Iguana de Monterrey.
Un show dantesco fue el que se vivió en el Café Iguana de Monterrey, la noche de este viernes, con la presentación estelar de Silverio. El DJ originario de “Chimpancingo”, Guerrero, puso a bailar a cerca de 300 personas deseosas de ser iluminadas por las mezclas y presencia de Su Majestad Imperial.
Fue cerca de la medianoche cuando Silverio apareció en el escenario para iniciar su show, siendo “Yepa, yepa, yepa” y “El iluminado” de las primeras canciones en sonar, con las cuales la adrenalina se apoderó de los cuerpos de los ahí presentes. “Monterreyenos tragan camote” fueron algunas de las primeras palabras que Silverio le dedicó a su público, con su ya característico estilo irreverente, ácido y retador.
Conforme avanzaba el concierto iba aumentando lo bizarro del show del “Eslabón perdido de la música electrónica”: insultos, escupitajos, señas obscenas y el progresivo desviste de Silverio, fueron convirtiendo aquello en un escenario dantescamente grotesco, que el público disfrutó al máximo.
“El baile del diablo”, “Pulgoso Mix” y “Gorila” fueron otras de las canciones que se dejaron escuchar en el show de Silverio; en un momento del concierto, una chica del público le regaló unas flores al originario de Chimpancingo, el cual no solo aceptó las flores, sino que se las echó a la boca para masticarlas y después escupírselas al público.
Las cosas aumentaron de nivel cuando Silverio comenzó “romper el turrón” con sus fans; ejemplo de ello fue cuando el DJ mexicano se quitó las botas y empezó a verter en ellas cerveza, la cual le arrojó a varias personas del público, optando algunas de ellas por beber de ese líquido, comentando Silverio que quedaban bendecidos por Su Majestad; en otro momento Silverio, vistiendo ya solamente su característica trusa roja, se quitó vellos púbicos y se los dio a un fan, además de que empezó a enseñar las miserias, tal y como ya lo tiene acostumbrado.
La parte final de este corrosivo espectáculo se daría de forma intensa con “Superídolo”, “Perro”, “Salón de belleza” y un fragmento de “Yepa yepa Yepa”, con lo que Silverio cerró de forma elegante su presentación en Monterrey.