El sábado 30 de julio, la sociedad secreta de A Band of Bitches se presentó en el Salón Morelos.
Fue una noche calurosa, de tráfico intenso. El Barrio Antiguo lucía más concurrido que lo habitual. Con la presentación de A Band of Bitches coincidían varios eventos en los bares de la zona, pero acá en el Salón Morelos (ubicado en el Barrio Antiguo de Monterrey) el público ya estaba congregado esperando, desde las diez de la noche, para ver a la banda. Así, para las 11:30 el Salón Morelos lucía lleno: aproximadamente 200 personas.
Con las caras descubiertas, en el preámbulo al show, a los integrantes de ABOB se les vio entre el público saludando a sus conocidos.
Fue en punto de la media noche cuando la banda tomó el escenario. “A Band of Bitches”, “Un mundo de posibilidades” y “Confidential Information” fue la potente triada con la que iniciaron la noche. De ahí “Stephanie Swift”, “Love in Gaza”, “The Maussan Archives”, “Sonido Paposho (pinche cumbión)” y “El diablo güero” sonaron y nos hicieron bailar sin prejuicios de ritmos. Y claro, el clímax de la noche llegó con el exitazo: “Noreste caliente” que reventó el Salón Morelos. Para terminar la velada, otro trío potente: “Mambo en trompeta para ti”, “Bailando con el diablo” y “La marcha de las putas”.
Fue una noche íntima, donde la banda se rodeó de amigos, e incluso, algunos de ellos los acompañaron en el escenario, entre ellos: Jorge “Pecas” Caballero que se unió en las percusiones de “Sonido Paposho” y Victoria Morales que interpretó con ellos “El diablo Güero”.
Es preciso mencionar que: A Band of Bitches es uno de los shows más completos que se han presentado en este escenario, recientemente abierto a bandas más grandes -como es el caso-. Y algo que resultó evidente esta noche, es que ABOB se camufla tras la máscara del desenfado, sin embargo, detrás de este proyecto hay todo un trabajo bien planeado que incorpora en el concepto del shock rock –o rock teatral- un trabajo artístico que enlista -según lo han declarado ellos mismos en diversas entrevistas- una diversidad de artistas involucrados.
Resalta en su show una ostentosa y opulenta producción que enfatiza en la iluminación, la calidad del audio, la interpretación y la teatralidad que incorporan con los disfraces –máscaras- , además del discurso del fin del mundo desde el cual se articula el trabajo musical.
Es una banda que vale mucho la pena experimentarla en vivo.