Miles de fans vibraron anoche con el concierto de Lany en Monterrey.
Los martes no son normalmente un día que emocionen a la gente. Sigues procesando el inicio de tu semana laboral y aún ves lejos el fin de semana, pero esto no fue así para miles de fans de LANY, grupo que se presentó anoche en el Auditorio Pabellón M.
Con una ausencia de 3 años, la banda de California estaba más que lista para deleitar a los fanáticos regiomontanos con mucha música, un show de luces simple pero preciso y con unas letras melancólicas ideales para cualquier persona que quiera hablar desde el corazón.
El público estuvo más que listo para recibir a la agrupación cuando las luces se apagaron para después iluminar las pantallas del escenario con unas luces rojas, dejando salir a la banda para escuchar los gritos eufóricos de la audiencia.
LANY abrió con “Get Away”, una de las piezas de su más reciente producción discográfica publicada el año pasado.
Palabra por palabra fue coreada de principio a fin por los espectadores, con mucha emoción, mientras la banda absorbía energía para lo que sería una noche increíble.
Se dio una combinación musical que llenó el ambiente de una gran sensación, gracias a las guitarras melódicas, bajo envolvente, una batería precisa y unos teclados que abruman con su presencia y calidez.
“Super Far” y “Cowboy in LA” y más canciones sonaron en el Pabellón M, haciendo que se llenara de sentimientos de amor y desamor (en algunas ocasiones al mismo tiempo).
“Nos da mucho gusto volver a México”, dijo Paul Jason Klein, vocalista de la banda, para después continuar con más música.
El talento musical de LANY es impresionante, pues al no tocar de manera prodigiosa sus instrumentos la combinación de todos sus elementos logra una gran resultado.
La voz de Paul llega a la mezcla ideal de casual y dulce, con un dominio admirable de los falsettos que logra ejercer de la forma más natural posible.
El setlist incluyó “Hurt”, una de sus primeras producciones y misma que los fans de hueso colorado cantaron a todo pulmón para ser reconocidos por la banda diciendo “si se saben está canción son fans de la vieja escuela”. Cabe mencionar y reconocer el solo de guitarra tan melódico en Hurt que hizo bailar al vocalista y al público junto con él.
“Pink Skies” se anunció en el escenario con un fondo de pantalla de nubes casualmente pasando como en un paisaje mientras todas las luces sobre la agrupación se iluminaban con un color rosa.
LANY es conocido por interactuar con su audiencia de forma espectacular y dejaron eso en claro cuando Paul bajó del escenario durante “If You See Her” para caminar entre los asistentes y cantar justo a la mitad del Pabellón M junto a sus fans. Pocas cosas son tan Rockstars como bajarse a cantar con la gente que fue a verte y LANY logró ejecutarlo de una forma orgánica y apasionante.
Inmediatamente sonó uno de los sencillos más amados por la gente que sigue a la banda, “Dancing in the Kitchen”, canción que da energía para bailar, cuyo coro cantaron en español demostrando su amor y felicidad por estar en México nuevamente.
Un pequeño letrero que decía “Prendan sus luces” invitaba a la gente a encender las linternas de sus teléfonos móviles, iluminando por completo el recinto mientras se coreaba al unísono “Malibu Nights”, una canción ideal cuando estás triste y con ganas de beber (como lo dictan las “buenas costumbres”).
La banda se despidió del escenario solo para que retumbaran las paredes del inmueble con una sola palabra … “Otra”, repetida en numerosas ocasiones.
LANY le dió placer al público regio con el ya conocido “encore”, dejando retumbar el clásico “you!” y “ILYSB”, unas de las canciones más románticas que podrías escuchar, pero que no cruzan la linea de lo cursi, haciéndolas una combinación ideal.
El grupo se despidió de Monterrey diciendo “¡Gracias, fueron perfectos, cantaron hermoso!” y así salieron del escenario.
Esta fue una noche donde se demuestra que el rock no está muerto, sino resurgiendo con nuevos talentos.
Con una carrera relativamente joven, LANY hizo vibrar a cada persona en el Pabellón M con música amena, envolvente, profunda y romántica.
Una banda que dio mucho y promete aún más. Si tu eres fan de la música que puede “ponerte de buenas”, que puedes poner en carretera para relajarte o eres un romántico sin remedio, no puedes perderte las próximas presentaciones de LANY.