El cuarteto conformado por los hermanos Abbott, Vinnie Paul y Dimebag, Rex Brown y Phil Anselmo, se presentó en la Sultana del Norte el 19 de julio de 1997 en el extinto Auditorio Coca Cola del Parque Fundidora y no lo hicieron en solitario, sino contando con invitados de lujo: Anthrax y los regios Pulsión.
El anuncio del concierto de Pantera en Monterrey
El 20 de junio de 1997 se dio una gran noticia para la fanaticada metalera de Monterrey, pues se anunció que Pantera se presentaría por primera vez en la ciudad, como parte de su tour The Great Southern Trendkill.
La cita sería en menos de un mes, el 19 de julio en el Auditorio Coca Cola.
Esta fue la segunda de solo dos fechas que el grupo texano programó en nuestro país, la otra fue el 17 de julio en el Palacio de los Deportes.
La noticia causó asombro y emoción, pues a principios de ese año estuvieron cerca de Monterrey más no llegaron a suelo regio, ya que Pantera vino a México para abrirle un concierto a Kiss en la capital del país y también dieron un show en McAllen.
Ya para ese entonces las cosas no andaban tan bien al interior del grupo, pues la división entre los hermanos Abbott y Anselmo era notoria, sin embargo estaban en la cúspide de su carrera.
Incluso algunos de sus viejos discos se estaban revalorando entre los jóvenes de esa época, porque varios de esos álbumes tuvieron un repunte en ventas.
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Anthrax, invitado de lujo
Y este concierto prendió aún más a los amantes del rock, ya que se contaría con la participación especial de Anthrax, otra leyenda del metal.
En ese entonces Anthrax estaba en la etapa final de su tour de promoción de “Stomp 442”.
La banda regia que le abrió a Pantera en Monterrey: Pulsión
Ah y también hubo toque regio en ese concierto, pues de manera conjunta OCESA y el programa Distorsión de D99 lanzaron una convocatoria para que bandas locales participaran en una dinámica para escoger a una banda abridora.
Los escogidos fueron Pulsión, trío local conformado por Joel Alanís (Mortuary), Roger Cerda y Aldo Guerra, quienes en ese entonces tenían poco tiempo de formación.
El concierto de Pantera en Monterrey
Finalmente, tras días de espera llegó la noche del 19 de julio de 1997. Poco menos de 10 mil personas se dieron cita en el entrañable Auditorio Coca Cola para vivir una jornada metalera de antología.
Pulsión se encargó de abrir el show teniendo una difícil misión por cumplir y contrario a lo que suele a ocurrir con las bandas abridoras, a los regios les fue bastante bien, pues fue mayor la respuesta favorable que la negativa.
Por espacio de media hora, los regios expusieron su propuesta y tuvieron de testigos a los hermanos Abbott, quienes apreciaron un parte del set de Pulsión desde un costado del escenario.
Este fue el inicio de una noche que se tornaría memorable.
Posteriormente tocó el turno a Anthrax, quienes demostraron por qué eran (y siguen siendo) una de las grandes bandas del metal de todos los tiempos.
“Antisocial”, “Caught in the Mosh”, “Got the Time”, “I’m the Law”, “Room for One More”, “Startin’ up a posse” y “Bring the noise” (cover de Public Enemy) fueron algunas de las canciones que interpretaron los neoyorkinos.
Y los miembros de Pantera también estuvieron viendo de cerca el show de sus colegas, demostrando la buena relación que mantenían con ellos.
Después llegó el momento estelar de la noche, Pantera salió al escenario causando el furor de las miles de almas rockeras presentes.
Aunque ya había diferencias marcadas entre los miembros de la banda, la verdad es que eso no fue obstáculo para que se entregaran por completo en el escenario.
Sonaron algunas del disco que estaban promocionando, como “Suicide Note Pt.II” y “Sandblasted Skin”, y otras de antaño como “Cowboys from Hell”, “Walk”, “Becoming”, “A New Level”, entre otras.
Pero la fiesta no se limitó al metal, pues de repente Anselmo le pidió a la raza que cantaran el Himno Nacional Mexicano, lo cual generó una avalancha de emociones, sonando duro las estrofas de Francisco González Bocanegra.
Y para terminar de completar una noche de ensueño, Anthrax se unió a Pantera para tocar algunos covers de Kiss.
De esta manera se vivió una noche memorable para el metal en Monterrey.