¡La espera valió la pena! Canciones largas, épicas y cargadas de poder conforman “Senjutsu”, el nuevo disco de Iron Maiden, cuyos tracks están disponibles en YouTube.
La espera terminó: a 6 años de la publicación de su último disco, Iron Maiden vuelve a sacar un nuevo disco al mercado, se trata de “Senjutsu”, el álbum número 17 en la carrera de la “Doncella de Hierro”.
Este disco está integrado por 10 potentes canciones (las cuales están en el canal oficial de YouTube de Iron Maiden) con las que la banda da un paso adelante en su carrera, logrando una obra redonda sin puntos flacos.
El sello de Iron Maiden está presente en cada canción y a pesar del paso del tiempo podemos escuchar a un grupo en plenitud.
El juego de guitarras de Dave Murray, Janick Gers y Adrian Smith es un verdadero espectáculo auditivo.
Steve Harris aplica el sonido galopante de su bajo logrando darle un toque épico a cada canción, y además toca el teclado en algunas canciones, sonido con el que le da cierta atmósfera al sonido de este álbum.
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Por su parte, Nicko McBrain se consolida como un baterista de época.
A pesar de los problemas de salud, Bruce Dickinson luce en cada tema. Logra alcanzar notas altas y su vibrato se escucha brillante.
Ya se habían liberado desde hace semanas los sencillos “The Writing on the Wall” y “Stratego”, los cuales llamaron la atención de propios y extraños por su calidad.
Pues bien, el resto de los temas están a la altura o incluso por encima de esas 2 canciones.
Para muestra está la canción con la que abre el disco y da nombre al álbum. Ya desde que suenan los primeros acordes de “Senjutsu” sabes que viene algo interesante.
También destaca “Darkest Hour”, cuyo intro es una verdadera exquisitez.
“Hell On Heart” es otra de las grandes piezas de “Senjutsu”; con sus 11 minutos de duración y su aire épico tiene para convertirse en una de las favoritas al momento de que arranquen los conciertos. Además tiene varios cambios de ritmo y melodía que muchos van a amar.
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“Death of the celts” y su atmósfera combativa gustará a muchos fans ultra de Iron Maiden, en la que destaca el bajeo de Harris.
Una de las más intensas y rockeras de este disco es “Days of future past”, en la que Dickinson da cátedra de canto.
“Time Machine” es una de las composiciones más interesantes de este disco, está compuesta por Janick y Steve.
Una atmósfera oscura se hace presente en “The Parchment”, sólida canción de 12 minutos de duración en la que los riffs de guitarra brillan.
“Lost in a lost world” no se queda atrás, con su intrincado ritmo, tema en el que destaca la batería de Nicko.
En síntesis, Iron Maiden consumó un regreso maravilloso que podría considerarse una nueva etapa del grupo británico, en la que se les percibe con nuevos bríos.
