El baterista británico es el único integrante que ha formado parte de todas las etapas de Pink Floyd.
Cuando se habla de Pink Floyd tal vez nos vienen a la mente grandes canciones y discos, así como los nombres de Syd Barrett, Roger Waters, Richard Wright y David Gilmour, pero quien también fue pieza importante del grupo británico es Nick Mason.
Y es que como a Mason siempre le ha gustado mantener un “perfil bajo”, tal vez los reflectores caigan poco sobre él, sin embargo su papel en Pink Floyd fue muy importante.
Nick Mason: el motor de Pink Floyd
Si Syd aportó la locura, Waters las letras profundas y los conceptos, Wright las atmósferas de ensueño y David el virtuosismo y la elegancia, Mason le dio a Pink Floyd el poderío sonoro que necesitaba.
Nicholas Berkeley Mason es el nombre de este baterista, quien nació el 27 de enero de 1944.
Él logró crear un estilo propio al paso del tiempo. Podía mantener un ritmo lento a lo largo de la canción o bien explotar y convertirse en una bestia de los tambores y platillos.
Como ejemplo de lo primero podemos mencionar “Echoes”, “Shine on you crazy diamond”, y de lo segundo “One of these days”, “Sheep”, entre otras.
No olvidar que durante la etapa psicodélica de Pink Floyd, la banda acostumbraba a hacer largos jams lo que exigía que Mason supiera improvisar y adaptarse a la locura de Barrett.
Tal vez su mejor virtud es el manejo de los silencios, es prácticamente un maestro de esto.
Fue además uno de los pioneros en usar el doble bombo, aunque nunca abusó de ese recurso, y los “loops”.
Por otro lado, un dato interesante es que es el único integrante de Pink Floyd que ha formado parte de todas las etapas del grupo, incluso estuvo en el proyecto previo llamado Sigma 6.
Hasta poco antes de la pandemia alcanzó a realizar algunos conciertos en los que retomó algunas de las primeras canciones de Pink Floyd, tras lo cual lanzó un disco en vivo.